El aborto, ¿la única opción? ♥

Cuantas veces en la vida nos hemos encontrado ante la misma pregunta que muchas mujeres se hacen: ¿el aborto o la vida? Nunca llegaríamos a tener una respuesta exacta, porque cada una tiene sus “razones” y aunque nada justifica la interrupción de una vida humana, muchas mujeres jóvenes y no tan jóvenes, podrían llegar a ese recurso, por desesperación, falta de orientación o simplemente por sentirse solas y abandonadas ante un problema que en su momento no pudo evitar.

Muchas mujeres alguna vez en su vida se verán ante la disyuntiva de llevar un embarazo a termino y hacer frente a la vida o si por el contrario, interrumpir esa vida para seguir una “vida normal” o como ocurre en la mayoría de casos en la mujer joven, salvarse de los regaños, el rechazo y los reproches de los padres,

 quienes a su vez, sólo piensan en el “honor” de la familia.  “¿Qué van a decir los vecinos? ¿Y la escuela?” Como padres jugamos un papel muy importante, para orientar a nuestros hijos, haciéndole énfasis en las consecuencias de un embarazo no deseado, haciéndoles conciencia de que la vida, no nos pertenece a nosotras para decidir cuando quitarla. Muchas veces pensamos que nuestros hijos nos lo dicen todo, que conocemos bien a nuestros hijos, que no nos ocultan nada, pero debemos aceptar que cada individuo desarrolla su propia personalidad y tienen su lado de privacidad e independencia, especialmente cuando ambos padres trabajan.

Como padres, pensamos en nuestras hijas como la niña bien centrada e inteligente, y así es, pero también nos cuesta aceptar que sin darnos cuenta la niña creció, que ya está en la edad de las ilusiones. Damos por sentado que saben separar lo correcto de lo incorrecto, las creemos incapaces de sucumbir a las tentaciones, o sencillamente se siente enamorada, se encuentra la joven enfrentado conflictos emocionales de los que no tiene el valor necesario para hablarlo con los padres.

Al mismo tiempo la mujer que se ve ante un problema de esa magnitud, que nunca pensó que un momento de debilidad o de diversión le iba a dar como resultado un hijo, que aparte de todo muchas veces por su corta edad no esta preparada para tenerlo mantenerlo, educarlo y proveerle los cuidados que ella misma necesita, porque es una niña teniendo un niño.

La mujer en esas condiciones, no piensa ni por un momento que tiene un bebé en el vientre, piensa solamente en que tiene una única opción, el aborto, porque desgraciadamente en esos momentos de angustias, el aborto se presenta como única opción, lamentablemente la decisión la toma la chica en soledad, en el abandono emocional de quien al igual que ella se dejó llevar por la emoción del momento.

¿Pero cual es la reacción de los padres cuando se dan cuenta?

Tendrá que ser un golpe muy fuerte enterarse que la niña a una corta edad está esperando un bebe y lo que es peor, dejarán de verla como la niña educada, estudiosa, fina y delicada, dejarán de verla como la niña de sociedad que por un momento de inconsciencia dejó empantanado el “honor’ de la familia, equivocadamente buscan la solución más inmediata, la salida “más fácil”, EL ABORTO.

Es lamentable admitir que no es algo que se da sólo entre la gente joven, muchas veces la mujer adulta piensa que por estar casada o por tener más experiencia en la vida, las excusas son valederas, o de peso suficiente para excusar el acto de interrumpir una vida. Muchas son las “razones” para querer interrumpir una vida, la mujer soltera no quiere ser madre soltera, la mujer casada no quiere más bebes, porque “la vida esta muy difícil” la joven, no quiere enfrentarse al “qué dirán” ni quiere interrumpir sus estudios; los padres no quieren que la imagen de su hija se vea ensuciada, pero como adultos,  como mujeres y padres, ¿por qué no se toman las medidas preventivas para evitar un embarazo no deseado?

Tenemos la obligación y el deber de respetar la vida, no tenemos ningún derecho sobre la vida de nadie y menos aún cuando se trata de un inocente que lo único que tiene para defenderse, es el dolor de sentir el rechazo de quien se supone, le debe defender con uñas y dientes: LA MADRE.

Si el bebé fue concebido dentro o fuera del matrimonio, mujeres afrontemos las consecuencias de nuestros actos, promovamos la vida del más débil, los hijos son el regalo más hermoso que Dios en su infinito amor nos ha dado, defendámoslos cuando los veamos amenazados, aún de nosotras mismas.

El bebé es un ser humano como tú y como yo, tiene derechos de ser respetado, amado y sobretodo, tiene el derecho de ser protegido por ti. Mujer, si tienes un bebé en el vientre, protégelo, si no quieres tener un bebe protégete, recordemos siempre que ante un embarazo no deseado, el hombre siempre toma el camino más fácil, huye de responsabilidades,  niega, se esconde y por último somos las mujeres quienes nos quedaremos a cargo de un pedacito de cielo, que será sólo nuestro, porque sólo es padre el hombre que quiere serlo.

Mujer, protege a tu bebé.